Entran a un bar tres hombres muy alcoholizados. El primero logra apoyarse en el mostrador.
- Por favor, sírvame un whisky
Llega el segundo y también, a duras penas, logra decir:
- A mi también sírvame un whisky
El tercero está por llegar al mostrador, pero trastabilla y cae de narices, completamente mareado. El primero lo señala y le dice al barman:
- A este no le sirva, patrón. Es el que maneja.
- Por favor, sírvame un whisky
Llega el segundo y también, a duras penas, logra decir:
- A mi también sírvame un whisky
El tercero está por llegar al mostrador, pero trastabilla y cae de narices, completamente mareado. El primero lo señala y le dice al barman:
- A este no le sirva, patrón. Es el que maneja.